En 2021 Plasencia Cigars celebró algo poco usual en la industria, la cosecha número 149 de la familia. Ya en 2017 habían celebrado la cosecha número 146, que reseñé en marzo de 2022. Pero para este nuevo cigarro decidieron hacer algo muy distinto: un puro hondureño. La capa proviene de Olancho en San Agustin, una capa que fue usada previamente en el CAO OSA por las siglas de la hoja. El capote es de la región de Jamastrán y la tripa de las regiones de Jamastrán, Olancho y Talanga. El cigarro es producido por la fábrica de Plasencia en Honduras, llamada Tabacos de Oriente. Hasta donde tengo entendido este cigarro existe en tres vitolas, de las cuales hoy voy a probar el más corto pero el más ancho, con dimensiones de 4 3/4 x 60, que si bien no es la vitola que compraría normalmente, fue un amigo quien me la dio, por medio de un intercambio.

La oscuridad de la capa del Cosecha 149 lo hace bien distintivo en le humidor, donde ha pasado los últimos 3 meses y los colores cobrizos de la anilla le dan un buen contraste. Pero la capa se ve algo rústica y el cigarro se siente considerablemente firme mientras le voy quitando la anilla inferior. Los aromas en la capa y en la tripa son consistentes, comenzando por notas de aserrín, pimienta y masa de pan, pero de un pan dulce, diría. Dado el ligero box press que tiene el cigarro, opto por un corte en V, no porque sea mejor, pero estos formatos de cepo mayor son todo un reto a la hora del corte y básicamente todo funciona. La calada en frío se siente bastante apretada, pero me da aromas a jarabe simple, pan con mantequilla y miel y la sensación picante típica de Plasencia.

El Cosecha 149 comienza distinto a como esperaba, pues muchas veces un tiro apretado en frío suele soltarse un poco con el calor, especialmente uno de la calidad de Plasencia. Pero no. El tiro se mantiene apretado, con sabores a tierra seca, mucha pimienta y no mucho más, incluyendo en el retrogusto. A lo largo del tercio afortunadamente aparecen sabores a leña, masa de pan (sin dulce esta vez) y básicamente eso. Hay una sección del cigarro que no quema bien y es la que se nota en la imagen, pero por mucho que traté de retocarla y corregirla, volvía a aparecer. La intensidad es media, con una fortaleza media-baja.

No hay grandes cambios en la construcción, o al menos no en el tiro del Cosecha 149 en el segundo tercio. La parte que no quemaba bien parece estar al ritmo del resto del cigarro, y esto lleva a la fortaleza a aumentar un poco, llegando hasta media en este tercio. Me temo que los sabores no han cambiado mucho, presentando los mismos de madera, pimienta y pan, aunque este último está mucho más bajo en este tercio. Me gustaría disfrutar mucho más de esta experiencia, pero el tiro simplemente no lo permite. El tiro apretado hace que le tenga que dar más caladas para sacar menos humo y que ese humo sea menos denso. incluso hay ocasiones donde tengo que darle un retoque en el pie para mantenerlo encendido. Además, el hecho que la fortaleza aumentó tanto en comparación al tercio anterior se traduce en una mayor sensación de mareo, gracias a la nicotina, que es gran parte de esa fortaleza.

Sin querer rendirme, mantengo viva la esperanza de que el Cosecha 149 mejorará en el último tercio. No es el caso y en esta sección los sabores son de pimienta y madera y más nada. Hay ocasiones donde pareciera que puede aparecer un sabor como de nueces o algún fruto seco, pero no es el caso. El hecho que la fortaleza sigue aumentando tampoco ayuda, pero todo es consecuencia del tiro tan apretado. Resisto hasta que marco una hora de fumada, cuando el cigarro decidió apagarse y no tenía ganas de encenderlo de nuevo. La fortaleza se colocó en alta, con una intensidad media.
Son pocos los tabacos hoy en día que colocan el terroir hondureño como parte central de su blend. Los de la familia Eiroa son los primeros que me vienen a la mente, pero que una marca como Plasencia, que realmente no ha dado el paso al reconocimiento como lo ha hecho Eiroa, pero que definitivamente tiene todo el mapa dibujado para hacerlo incluso mejor, es asombroso. Mi experiencia con la marca y con el tabaco en general me deja clarísimo que este cigarro simplemente salió defectuoso como puede suceder con tantos otros, que si bien el control de calidad es bueno, no es infalible… y un cigarro con un tiro apretado no puede ser un buen cigarro. Por ello, me aguanto la evaluación a fin de probar uno que no dé problemas y poderlo reseñar de manera objetiva. Pero no dejo de compartir la experiencia con ustedes, para que sepan que no todo es perfecto.

Ficha Técnica:
Fabricante: Plasencia Cigars
Marca: Plasencia
Modelo: Cosecha 149
Dimensiones: 4¾ x 60
Tamaño: Santa Fe (Gordito)
Origen: Honduras
Capa: Honduras (Olancho San Agustín)
Capote: Honduras (Jamastran)
Tripa: Honduras (Jamastran, Olancho San Agustín, Talanga)
Precio: $12,50
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