En junio de 2023 me invitaron unos conocidos a una cata a ciegas de cocuy, en donde probé como cinco variedades distintas. Una cosa que me llamó mucho la atención de esa invitación era que solamente éramos 4 asistentes y yo era el único que no era sommelier. Incluso, los otros tres habían ganado el premio de mejor sommelier de Venezuela en años distintos. Pero estos tres son amigos míos y la cata fue muy divertida para comparar y contrastar la experiencia.
Posterior a esta cata, nos presentaron los cocuy que habíamos probado y de la marca Fénix habían dos productos, uno llamado Reposado y otro Añejo, y lo que más nos llamó la atención del que terminó siendo el Añejo era la clara y dominante influencia de la madera. El cocuy sabía únicamente a madera y con unos matices mínimos de cocuy. En su momento la recomendación fue que eso no saliera al mercado porque desvirtuaba el sabor de lo que un cocuy debería ser. Ese producto estaba embotellado a 38% de alcohol.
Hace unos meses me contactó uno de los dueños de la marca, independiente de esa cata a ciegas que había hecho y más relacionado con los videos que publico en redes sociales, a fin de que probara su cocuy añejo y el clarito (o joven, o sin añejar, no sé cómo se llama). El día que me los entregaron, estaba este Añejo que voy a probar hoy y ese Blanco, pero no me entregaron el joven porque el corcho se había desgastado y el líquido tenía partículas en suspensión. Me comentaron que las botellas nuevas tienen un corcho sintético, pero la que me iban a dar tenía corcho natural que se iba descomponiendo.
Este Añejo «nuevo» está embotellado al 25% de alcohol y mantiene sus mismos 11 años de añejamiento en barricas de roble blanco francés, ex-vino, que fue lo que me dijeron originalmente que era el origen de esa barrica. Curiosamente, el Reposado que probé en la cata a ciegas destacaba que ese reposo era en barrica ex-bourbon.
En copa el líquido tiene muchísimo color de la barrica, siendo casi naranja e incluso algo turbio. En nariz tiene abundantes notas de agave y de madera, mientras que hay aromas más sutiles de uva y balsámico.
Aunque tiene apenas 25% de alcohol, se sigue sintiendo un cierto golpe alcohólico y sabores balsámicos y de agave, con una nota más suave de la madera y un ligero ahumado. El retrogusto es más ahumado y con un matiz de vino viejo que fácilmente puede ser ese balsámico que sentí anteriormente.
Once años realmente no es un número redondo y viendo cuánto este cocuy ha absorbido de la madera, me impresiona que no lo hayan sacado de la barrica antes. Tengo incluso una teoría que dice que se les olvidó que tenían ese cocuy ahí y lo sacaron tanto tiempo después porque se acordaron. Pero es sorprendente cuánto ha cambiado con una mayor dilución y a 25% conserva más sabores de cocuy y la madera, aunque todavía bastante presente, se siente mucho menos invasiva.
Ficha Técnica:
Fabricante: N/D
Nombre del Cocuy: 11 Años
Marca: Fénix
Origen: Venezuela
Edad: 11 Años
Precio: N/D
Densidad alcohólica: 25%
Puntuación: 82
Humo y Tabaco 