Quizá este sea el único blog venezolano en el que hoy en día se hable mal de maduro, pero en este caso me refiero a la capa. Bueno, hasta ahí estos chistes malos.
El hecho es que hay una gran confusión sobre las diferencias entres las capas maduro y oscuro. Muchas personas piensan que la diferencia simplemente es de color entre las hojas, pero luego de conversar con varias personas al respecto, estas son mis conclusiones:
Una capa Maduro Natural toma su nombre del proceso usado para fermentar las hojas. Puesto que maduro se refiere a que está madurada, el sinónimo de fermentar es madurar (en este contexto). La fermentación de una capa madurada incluye tomar las hojas y apilarlas en un pilón, en donde hojas sobre hoja comenzará a fermentar a altas temperaturas, llegando hasta los 65ºC, donde las hojas cambiarán de color, textura y sabor, dependiendo del tiempo y las temperaturas alcanzadas en el pilón.
El tiempo y temperatura óptimos será determinado por las características de cada cultivo durante una cosecha. Si hubo un cultivo ‘húmedo’, con muchas lluvias, la hoja del tabaco será más grande, más clara, con venas más delgadas y menos oleosas. Una cosecha húmeda será fermentada por menos tiempo y a temperaturas inferiores, por lo que no será una buena candidata para capa maduro.
Por otro lado, en un cultivo ‘seco’ las hojas serán más pequeñas, con venas más gruesas y las hojas serán más oscuras y tendrán más aceites. El proceso de fermentación para una cosecha seca es completamente diferente, tomando tiempos mayores a temperaturas superiores, y produciendo una hoja maduro.
Otro factor a tomar en consideración es el tipo de tabaco. Los tabacos Corojo, Broadleaf, ecuatorianos y nicaragüenses son tratados más o menos igual para producir capas maduro, permitiendo que alcancen temperaturas mayores (de nuevo, hasta los 65ºC), aunque cada empresa tiene su propio método y receta para fermentar los maduros.
Por otro lado, el proceso de fermentado de las hojas Camerún y Connecticut es típicamente completado en un tiempo menor y con temperaturas inferiores. Estos tipos de capas no producen buenos maduros porque tienden a ser muy frágiles para aguantar la fermentación del maduro.
Puros famosos con capa maduro incluyen el Cohiba Maduro 5 y el Camacho Triple Maduro.

Al otro lado de la palestra están los Oscuros que, como su nombre indica, son oscuros. Las hojas oscuras son tomadas normalmente de la parte superior de la planta de tabaco, pues son las que se dejan más tiempo (en promedio un 50% más) en la planta y son expuestas a la mayor cantidad de luz solar y comienzan a curarse antes de ser cosechadas. Por tanto, son hojas oscuras, gruesas, ricas y con mucho más sabor, sin tener que pasar por un proceso de fermentación.

Las hojas oscuro luego pasan por un proceso normal de fermentación, con menor tiempo y temperaturas inferiores que las de un maduro. Algunas empresas dejan estas hojas en barricas, baúles o guacales de madera, y durante este proceso de madurado se pondrán más oscuras, incluso verán algunas hojas completamente negras, lo cual hace que algunos las confundan con maduros. En realidad es casi imposible diferenciar hojas maduro de oscuro simplemente basándonos en el color, sino que es una combinación de los diferentes procesos de fermentación y la ubicación de las hojas antes y después de la cosecha lo que lo determina.
Puros famosos con capa oscuro incluyen el La Flor Dominicana Oscuro y My Father Le Bijou 1922.
Para finalizar, existen algunos fabricantes que ‘hierven’ o ‘pintan’ las hojas para aparentar una capa más oscura. Este proceso no hace que el cigarro sea maduro u oscuro, sino que utiliza un proceso de combinar distintos ingredientes con las hojas para producir un color más oscuro.

El proceso de cocinar las hojas es bastante común, pero muy pocos fabricantes lo admiten. Esto se realiza normalmente colocando las hojas en una olla llena de una mezcla caliente de diferentes ingredientes, y las hojas se impregnan del líquido, cambiando las características de la hoja. El líquido también puede ser rociado ligeramente sobre las hojas de la tripa o untado sobre la capa externa. La receta de esta mezcla varía, tanto como su nombre, pero lo más común es llamarlo ‘betún’. se hace a partir de tallos de tabaco, picadillo, melaza o azúcar, jugos y cáscaras cítricos, ron y otros ingredientes. Estos componentes son combinados en un recipiente de agua e infusionados durante varios días, dando como resultado un líquido que parece café. esta práctica no está bien vista dentro de la industria, pero se sigue haciendo continuamente.
Como mencioné, pocas marcas admitirán el uso de esta técnica para sus puros, pero que recuerde ahora mismo, el La Gloria Cubana Serie N que fumé hace poco debe haber tenido esta técnica, y aunque en un momento en que me cayó un trocito de capa en la lengua se sintió muy raro, el sabor del puro fue extraordinario.