Nikka es la segunda destilería más grande de Japón, siendo dueños de dos destilerías, una en Yoichi y otra en Miyagikyo. La de Yoichi está ubicada en Hokkaido, la isla más al norte de Japón, con un clima muy similar al escocés. La destilería de Miyagikyo se encuentra en la isla Honshu, en el medio de Japón.
La información de este blend de Nikka es un poco difícil de determinar, pero al parecer incluye más de cien whiskies de malta y de grano provenientes de ambas destilerías, y está doble añejado. Esto quiere decir que cada whisky que forma parte del blend está añejado el tiempo que sea necesario y una vez que es combinado, se vuelve a envasar en barricas y se deja añejar un tiempo adicional. Esta última maduración se lleva a cabo en barricas ex-bourbon y ex-jerez. Aunque no hay una determinación de la edad de los whiskies que lo componen, supuestamente luego de reenvasado se deja de tres a seis meses en barrica para que los sabores se combinen bien.
El Nikka Whisky From the Barrel, que en verdad se llama así porque al parecer nadie en mercadeo pudo llegar a un nombre sensato, como no sé… Toki, Hakushu, Onishi, Yamazaki o algún otro japonés pero pronunciable. Deben haber puesto a la misma persona a diseñar la botella que es tan poco imaginada también, pero esa no me llega a mí.

Cuando sirvo el whisky en la copa me quedo viendo un poco el líquido, pues es muy llamativo con un color entre amaderado y bronce, con lágrimas largas y delgadas y abundantes en la copa.
En nariz desprende aromas agridulces, con un fuerte tanino y caramelo con miel. Una segunda probada me permite apreciar aromas de jerez, seguidor de dátiles y pasas. Finalmente se aprecian notas de canela y guayabita (pimienta dulce). Sin embargo, a todos estos aromas le acompaña una nota alta de alcohol, que confirmo revisando que tiene más de 50% de él.
En boca el Nikka Whisky from the Barrel se siente bastante fuerte, cargado de sabores como esperaría de un whisky que no es diluido al ser retirado de la barrica. Tiene sabores de caramelo quemado, taninos, especias, brandy, pasas, dátiles y una complejidad que te da diversos matices de cada uno. Pero también le acompaña un sabor ácido y hasta desagradable, que lo siento cuando le doy un trago largo al whisky.
Es decir, si lo tomo suave, en tragos pequeños y los paso rápido por la boca a la garganta, el whisky se siente bastante bien. Pero si tomo un trago y lo paseo por la boca, los sabores comienzan a ser hasta desagradables, o al menos aturden y no me terminan de gustar. Es una lástima porque en nariz era muy agradable, pero esa nota fuerte de alcohol que sentía puede ser parte de este sabor.
Sin embargo, dada mi (muy corta) experiencia con los whiskies japoneses, y con los del resto del mundo, una cantidad alta de alcohol es comprensible e, incluso, aceptada. Pero los sabores adicionales y desagradables en un whisky, no lo son.
Al final, eso es lo que espero, pues aunque el nombre y la botella llevan poca imaginación, podría esperar un whisky rico y complejo, lo cual es este hasta un cierto punto. Pero en términos de sabores, no puede ser un whisky para pasarlo rápidamente, sino más bien para disfrutarlo y esa nota ácida/amarga no se disfruta.
Ficha Técnica:
Fabricante: Nikka Whisky Distilling
Nombre del Whisky: Whisky From the Barrel
Marca: Nikka
Origen: Japón
Edad: N/D
Precio: $40
Densidad alcohólica: 51,4%
Puntuación: 86
Un comentario en “Whisky: Nikka Whisky from the Barrel”