El Chateau Fuente es un cigarro que casi todo el mundo ha probado, en capa Natural o Maduro, siendo este último el más fuerte de los dos y posiblemente la razón principal por la que mucha gente se incline hacia él. No obstante, cuando mis amigos de Tabarena me contactaron para probar uno de ellos, les pedí el Natural, que es efectivamente el que menos he probado y el que mayor curiosidad me daba. Es un cigarro de precio medio, principalmente porque hay muy poco de lo que AF hace que sea de precio bajo, pero el hecho de que por unos $8 tengas un cigarro de estas dimensiones, de esta marca y hecho por manos tan expertas también hace que suene más bajo su precio. Su capa es Connecticut, así que no hay mucho más que buscar para saber cómo será de fortaleza.

Pero aunque es una capa Connecticut y es un cigarro con esta calidad y renombre, llama la atención lo imperfecta que es su capa. Es como si no hubiesen usado los mejores materiales, pero no es la primera vez que me fumo un cigarro de esta marca con esta apariencia, pero sí estoy dispuesto a que me vuelva a sorprender. La capa tiene aromas dulces y de madera, estos últimos sin duda por el hecho que el cigarro viene envuelto en una lámina de cedro. La calada en frío tiene aromas más llamativos que me invitan a encenderlo e incluyen miel, café y durazno deshidratado. El aire pasa perfectamente por estas dimensiones, así que el deseo de encenderlo es más fuerte aún.

Lo piqué con la guillotina en V y realmente es una experiencia distinta. Los primeros sabores al encenderlo son de madera y miel, muy parecidos a la calada en frío, pero también hay pimienta y mucha más de la que esperaría de un Connecticut dominicano. También es dulce y el sabor de miel con el dulce combinan de maravilla y en las notas secundarias hay tierra y cuero, mientras que el anillo de combustión, aunque no perfecto, no me preocupa. El humo es abundante y la ceniza no se sostiene del todo, pero al menos estoy disfrutando del cigarro gratamente.

En el segundo tercio los sabores son similares, aunque la nota picante es más sutil y el retrogusto ofrece notas considerables de nueces. Cuando supero la mitad el dulce del cigarro no potencia el sabor de miel, sino más el de notas florales que aparece más o menos en ese momento también, aunque más hacia un poco antes del punto medio. También hay notas de cáscara de cítrico, quizá de limón amarillo o más bien genérico sin atarme a ninguna fruta. El anillo de combustión y demás características técnicas se comportan adecuadamente, sin sorprender mucho pero afortunadamente tampoco desilusionan. La intensidad es media baja y la fortaleza también, pero más hacia baja que hacia media; exactamente como debe comportarse.

El Chateau Natural concentra los sabores de madera en el último tercio, haciendo que se defina perfectamente como cedro e incluso presente una nota ligeramente amarga que denota la concentración de esa madera. Los sabores dulces siguen presentes y siguen apoyando las notas florales y algo de tierra y cuero, y el retrogusto es denso y complejo, que no es lo que espero de un cigarro de capa Connecticut y es definitivamente lo que está haciendo esta experiencia más interesante. Al cabo de una hora y 45 minutos, este Chateau Natural llega a su fin, sin calentarse, sin suavizarse y sin incomodar.
Lo menos que uno espera de un cigarro con esta trayectoria y esta «cercanía» es que te sorprenda. Es más, lo único que esperas de él es que no se apague. Pero que un cigarro tan terrestre y normal de Arturo Fuente logre algo más de lo que esperas por un lado sorprende gratamente, pero por el otro es casi esperado, porque si algo espero de una marca como Arturo Fuente es que me haga querer volver a fumar sus productos. El Chateau Natural es bastante mundano en sus dos primeros tercios, sin que eso sea un aspecto negativo. Pero en el último no se diluye, sino que más bien se fortalece y se hace más complejo y eso es algo que mejora la experiencia y hace que lo quieras fumar mucho más lento, incluso si no va a durar más. Es una muy buen inversión y definitivamente algo que le da valor a tu dinero.
