Fratello – Navetta Inverso

Aunque creo que he mencionado esto antes, hace tiempo que no hago una reseña de un Fratello así que por si las dudas, hago mención de nuevo: Omar de Frías, el creador de Fratello Cigars trabajó en la NASA durante 12 años antes de dedicarse 100% al tabaco. Aunque la compañía la creó en 2013, no fue sino hasta 4 años más tarde que decidió dedicarse de lleno a ella. Entre los primeros productos que lanzó luego de su salida de la agencia aeroespacial estaba un cigarro llamado Navetta, que quiere decir nave en italiano. El cigarro venía adornado con referencias muy obvias a los viajes espaciales y con él creó cuatro vitolas nombradas por las naves de la NASA.

En 2018 Frías decidió relanzar el Navetta pero invirtiendo los componentes y llamándolo Inverso. Por lo mismo, el Navetta Inverso tiene capa nicaragüense, capote ecuatoriano y tripa de Nicaragua y República Dominicana. Para quienes hayan probado el Navetta original, este cigarro sirve como recordatorio de cómo puede cambiar el sabor de un cigarro incluso colocando las hojas en distintos lugares. Para quienes no lo hemos probado, es una muestra más de la creatividad que tienen los blenders y lo que se puede lograr con una mente brillante.

Para esta ocasión los cigarros llevan simplemente el nombre de su vitola y este es el Toro Grande. Lo recibí como parte del paquete mensual de Cigar Federation para diciembre de 2018, por lo que cuenta con poco más de 10 meses en el humidor. El cigarro se siente bastante firme y la capa, aunque oleosa, no ofrece muchos aromas y apenas se nota madera y tierra mojada. En el pie se sienten más, e incluyen tierra seca, donut y un toque de maní. La calada en frío presenta salsa A1 y toques de pimienta y dulce.

Lo primero que me impresiona del Navetta Inverso es lo apretado del tiro. Ya en la calada en frío lo había percibido, pero el encendido confirma que el tiro está bastante apretado, y eso lo esperaría en un cigarro tipo corona o alguna vitola pequeña, pero no en un cigarro con cepo 54. Pero hay una cantidad decente de humo y sabores de madera y tierra seca, así como una cantidad poderosa de pimienta.

A lo largo del primer tercio se sienten distintas tonalidades del sabor de pimienta, lo cual me lleva a pensar que hay más de un tipo, e incluso se siente como pepperoncino. El retrogusto es pura pimienta también, pero aparte de estos sabores la intensidad se siente entre baja y media. La línea de quemado es ligeramente variable, pero el tema del tiro es lo único que me tiene un poco molesto, pues me toma 20 minutos superar el primer tercio, que es un número respetable, pero ya el dolor en los músculos de la cara no es normal.

Para el segundo tercio el Navetta Inverso no muestra señales de que mejorará su tiro y el sabor de pimienta se hace más intenso por un momento pero le acompañan sabores de carne curada y tierra. El retrogusto sigue siendo de pura pimienta y por lo general siento que el cigarro podría aportar muchos más sabores si tan solo estuviera un poco más suelto.

Superando la mitad del cigarro se siente como si el tiro se soltara un poco, pero entonces es una avalancha de pimienta que no me deja apreciar más nada y a los 2 minutos se vuelve a hacer muy apretado, incluso más que antes. Los sabores son de pimienta y no mucho más. El retrogusto es mortal para la nariz así que lo evito durante un rato, o al menos hasta el último tercio, que la pimienta parece suavizarse un poco pero nunca desaparece. Se sienten más sabores de madera y es un cigarro relativamente agradable… con un tiro terrible.

Hacia el final la intensidad del cigarro es media y se sigue sintiendo apretado. Como un minuto después de la imagen decidí que había tenido suficiente y lo boté. Aunque no tenía nada de nicotina que pudiera percibir, la pimienta se queda en los labios durante largo rato después de dejarlo. El tiempo total de fumada fue de 70 minutos.

Omar de Frías fue quien dijo que es impresionante cuánto un cigarro puede cambiar si inviertes las hojas de la liga, aunque esto puede probarse incluso omitiendo una sola hoja cuando se tuerce el cigarro o incluso usando los mismos componentes en una vitola distintas. Aunque los Fratello que he fumado por lo general me han gustado, el Navetta Inverso no está al mismo nivel de los demás, incluso con su aparente construcción impecable (al menos a la vista), pero más que nada porque el tiro hizo imposible disfrutar de la fumada y siempre se sintió como si el cigarro no alcanzara su potencial. La pimienta es el sabor predominante en este y, durante gran parte de la fumada es el único sabor. Leyendo un poco otras reseñas y conversando con amigos me he dado cuenta que el tema del tiro es predominante, así que no se lo atribuyo a un problema de este cigarro en particular, así que por lo pronto me quedo con otros Fratello.