Reserva Privada, Reserva Limitada, Solera Centenaria… para Carupano esto se llama Carupano 21 y ya. Está el Carupano 21 viejo (45% alcohol) y el Carupano 21 nuevo (40% alcohol) y esa es básicamente la diferencia.
El viejo tiene botella negra, acampanada y nada tiene que ver con las demás. El nuevo tiene una botella transparente, igualmente acampanada pero mucho más estilizada y una identidad gráfica que va más acorde al resto de los productos de la marca.
Quizá la diferencia más notable es que este nuevo acentúa la U en Carúpano. La antigua no.
Sin embargo, entre expertos y fanáticos no relacionados con la marca, hay más de uno que piensa que la diferencia entre este y el anterior no se limita a 5% de alcohol. Si bien en un destilado con 45% como el Solera Centenaria el golpe alcohólico será más pronunciado y por ende, la diferencia radicaría en una mayor suavidad en el Reserva Privada, en mi experiencia la diferencia es mayor.
Me parece que el Reserva Privada precisamente carece de ese «punch» que hacía del Solera Centenaria un ronazo. También siento que hay una diferencia de sabores y de bases. Sin embargo, me remito a la prueba.

Ciertamente la botella va más acorde a lo que es la marca. Es decir, sigue la misma identidad gráfica de las botellas de 6, 12 y 18. Me hubiese gustado que esta botella fuese negra u opaca y no transparente… creo que pierde importancia cuando es transparente o quizá es simplemente que por mucho tiempo identifiqué Carupano 21 como una botella negra. Afortunadamente eliminaron la palabra Solera de su nombre, para no crear confusión de su origen.
Lo que sí quisiera es hacer de esta una reseña de por sí sobre este ron y no tanto una comparación con el 45%. Sin embargo, en copa el líquido se nota más amarillo que el 45%, menos ocre y con destellos hacia naranja claro. Se aprecia como un líquido con una densidad media y lágrimas de bajada lenta.
En nariz el golpe alcohólico es medio-suave, permitiendo apreciar notas desde la primera instancia. Fuertes notas de vainilla, caramelo, avellanas tostadas, chocolate blanco, toffee ligero, tostado suave y la típica nota yodada de Carupano que es inevitable y apreciada como un factor diferenciador.
En boca tiene una intensidad alcohólica media-baja, notas saladas, madera, cáscara de cambur (banana), caramelo, frutos secos como avellanas y nueces, azúcar morena, pero notas dulces muy tenues. Pero se siente una separación entre la fase de sabores y la fase de alcohol, como un pequeño choque. El retrogusto incluye avellanas, vainilla y caramelo.
En cuanto a la puntuación, yo le daría un 86. Pero es inevitable compararlo con el Solera Centenaria y voy a tratar de hacer esa comparación lo más sintetizada posible.

Para empezar, honestamente siento que la diferencia entre ambos rones va más allá de 5% de alcohol. Es cierto que ese pequeño porcentaje significa bastante en términos de dilución y volumen total del contenido,
pero técnicamente si le pusiera unas gotas de agua al Solera Centenaria lograría una concentración similar a las del Reserva Privada y sería comparable, pero no es así. La diferencia es notable.
La justificación principal de la marca sobre este cambio es que responde a un tema de concursos. Aparentemente, cuando un ron tiene 40% de alcohol, puede abarcar más categorías en concursos internacionales que si tiene 45%, pues supuestamente superar el 40% lo limita a no poder competir contra «los mejores».
Pero más allá de si eso es verdad o no, mi apreciación de los dos es que uno de los factores a destacar en el Carupano 21 45% era ese carácter «indomable», en el sentido de que si bien es un ron que alcanza 21 años en su mezcla, que es caro y que es «limitado», igualmente es un ron de sabores fuertes, agresivos y algo que no te vas a tomar si no sabes de ron. Eso es un factor muy diferenciador tanto en la gama de Carupano como entre la gran mayoría de los rones nacionales. Por ello, también tenía a ese Carupano 21 como uno de mis 3 mejores rones venezolanos (Cacique Antiguo y Roble Viejo Ultra Añejo siendo los otros dos).
Pero el Carupano 21 40% parece un ron «domado». No tiene esos característicos, salvo el yodado. Carece de matices, de dimensión, de la majestuosidad que hacía del 45% un ron respetable. En cierto modo, pareciera que este 40% es un ron para coctelería premium, y no para tomar solo. Ninguno de mi círculo de amigos y fumadores lo usa para tomar solo, como hacíamos con el 45%. Este nuevo no está ni en mi top 10 de rones venezolanos. Simplemente, me parece que le falta personalidad.
Adicionalmente, y esto es más una crítica a la marca, me parece que el acierto que lograron con el rediseño de las botellas y las etiquetas era esencial, necesario y les quedó perfecto. Pero ese trabajo se ha visto mermado por la calidad del contenido de algunas botellas. En lo muy personal, el Añejo 6 y el Oro 12 (que ahora se llama 12 Reserva Exclusiva, sin cambio de sabor) son los mejores de su gama de números, junto con el 21 Solera Centenaria. En su gama de colección, el XO y el Legendario me parecen los mejores. Los que quedan hacia el centro, como el 18 Reserva Limitada, este nuevo 21 Reserva Privada y el Zafra 1991, me parecen muy suavizados, como si exigieran una preparación coctelera o simplemente son demasiado normalizados.
Ficha Técnica:
Fabricante: Destilería Carupano
Nombre del Ron: 21 Reserva Privada
Marca: Carupano
Origen: Venezuela
Materia prima: Melaza
Edad: Blend de 6 a 21 años
Precio: $25
Densidad alcohólica: 40%
Puntuación: 76